Los esfuerzos de China para competir con Starlink de SpaceX desplegando una enorme constelación de internet por satélite están fallando. A pesar de los planes de lanzar hasta 15,000 satélites para el 2030, China ha desplegado menos del 1% de su objetivo, principalmente debido a la escasez de cohetes y la intensa competencia por recursos de lanzamiento. El proyecto Qianfan (Mil Velas), destinado a proporcionar cobertura global de banda ancha, enfrenta importantes retrasos y desafíos logísticos. Mientras tanto, Starlink de SpaceX ha avanzado rápidamente, con casi 8,000 satélites ya en órbita. Estos contratiempos plantean dudas sobre la capacidad de China para ponerse al día en la nueva carrera espacial global.
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