Gaza está experimentando una grave y empeorante crisis de hambre, con informes de niños y poblaciones vulnerables muriendo por inanición y desnutrición. El bloqueo israelí, el conflicto en curso y las restricciones en las entregas de ayuda han dejado a más de 2 millones de personas, incluidos 1 millón de niños, en una necesidad desesperada de alimentos y suministros médicos. Organizaciones internacionales y trabajadores humanitarios advierten que la situación está empeorando rápidamente, con muchos obligados a arriesgar sus vidas por migajas de ayuda. A pesar de algunos recientes lanzamientos aéreos de ayuda y la presión internacional, la cantidad de ayuda que llega a Gaza sigue estando muy por debajo de lo necesario, y las acusaciones vuelan entre Israel, la ONU y Hamas sobre la responsabilidad de la crisis. La Organización Mundial de la Salud y UNICEF han lanzado alarmas sobre una inminente hambruna provocada por el hombre, pidiendo un acceso humanitario urgente y sostenido.
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